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For Immediate Release:
January 25, 2022
Contact:
Antonio Saadipour | Program Associate
asaadipour@lawg.org
LAWG Encourages U.S. Government to Support Incoming President Xiomara Castro’s Anti-Corruption Efforts, Vice President Harris to Attend Inauguration
Washington, D.C. – The election of Xiomara Castro offers a rare, valuable opportunity to strengthen the rule of law and address the root causes of migration from Honduras. Vice President Harris’s scheduled attendance at the inauguration shows that the Biden Administration recognizes and welcomes this opportunity. The incoming President has made promising commitments to establish a UN-led anti-corruption mechanism, revoke laws that have protected corrupt officials and members of Congress while making it easier to restrict and punish activists and journalists seeking to expose and end corruption and human rights abuses, and to focus attention on jobs and access to health care and education for all Hondurans. The Latin America Working Group (LAWG) urges the U.S. government to encourage the incoming president to fulfill her promises and to support her efforts to serve and improve the lives of Honduran citizens.
At the same time, Honduras’s problems are not resolved by a new government taking office. The new administration will face forces of corruption and organized crime that have infiltrated the legislature, judiciary, security forces, parts of the private sector, and national and local government structures. Xiomara Castro’s administration will need to act decisively to dismantle corruption and drug trafficking networks within national government bureaucracy and security forces. The current impasse over the leadership of the Honduran Congress shows how challenging it will be to tackle these forces of corruption and organized crime.
“The election of Xiomara Castro offers a chance for the United States to show Honduran citizens that the U.S. government now stands for their rights, rather than on the side of the corrupt elites governing Honduras since the 2009 coup,” said Lisa Haugaard, co-director of the Latin America Working Group (LAWG). “The U.S. government should work with the incoming President to fulfill her promises to end corruption and to improve the lives of Honduran citizens. The Biden Administration must work closely with diverse sectors of civil society in Honduras to address the root causes of forced migration, improve the lives of the most vulnerable, and to expand the space available to Honduran citizens to exercise their rights without fear of retribution.”
“President-elect Xiomara Castro’s inauguration is an opportunity for the U.S. to support Honduran immigrant communities in the U.S. and their families back home by redesignating Temporary Protected Status (TPS) for Honduras,” added Daniella Burgi-Palomino, co-director of LAWG. “The reality is that Hondurans are still suffering the impacts of the twin hurricanes compounded by ongoing natural disasters and TPS would allow their family members in the U.S. to act as a lifeline by sending money back home, also strengthening the Honduran economy. This is what the TPS statute was created for. Granting TPS for Honduras will be beneficial for communities in the United States and Honduras and will be a strong recognition of the contributions of Honduran immigrants in the United States. It’s time for the U.S. to use this tool.”
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Para publicación inmediata:
25 de enero de 2022
Contacto: Antonio Saadipour | Asociado de programas
asaadipour@lawg.org
LAWG alienta al gobierno de EE.UU. a apoyar los esfuerzos anticorrupción de la presidenta entrante Xiomara Castro, la vicepresidenta Harris asistirá a la toma de posesión
Washington, D.C. – La elección de Xiomara Castro ofrece una única y valiosa oportunidad para fortalecer el estado de derecho y abordar las causas fundamentales de la migración desde Honduras. La asistencia programada de la vicepresidenta Harris a la inauguración muestra que la Administración Biden reconoce y agradece esta oportunidad. La presidenta entrante ha asumido compromisos prometedores para establecer un mecanismo anticorrupción liderado por la ONU, revocar leyes que han protegido a funcionarios y legisladores corruptos y que a la vez facilitan la restricción y el castigo de activistas y periodistas que buscan exponer y poner fin a la corrupción y las violaciones de los derechos humanos y centrar la atención en el empleo y el acceso a la salud y la educación para todos los hondureños. El Grupo de Trabajo sobre Asuntos Latinoamericanos (LAWG por sus siglas en inglés) insta al gobierno de EE.UU. a alentar a la presidenta entrante a cumplir sus promesas y a apoyar sus esfuerzos para servir y mejorar las vidas de los ciudadanos hondureños.
Al mismo tiempo, los problemas de Honduras no se resuelven con la toma de posesión de un nuevo gobierno. La nueva administración enfrentará fuerzas de corrupción y crimen organizado que se han infiltrado en la legislatura, el poder judicial, las fuerzas de seguridad, partes del sector privado y las estructuras gubernamentales nacionales y locales. La administración de Xiomara Castro deberá actuar con decisión para desmantelar las redes de corrupción y narcotráfico dentro de la burocracia del gobierno nacional y las fuerzas de seguridad. El estancamiento actual sobre el liderazgo del Congreso hondureño muestra cuán desafiante será enfrentar estas fuerzas de corrupción y crimen organizado.
“La elección de Xiomara Castro ofrece una oportunidad para que Estados Unidos le muestre a los ciudadanos hondureños que el gobierno estadounidense ahora defiende sus derechos, en lugar de estar del lado de las élites corruptas que gobiernan Honduras desde el golpe de 2009”, dijo Lisa Haugaard, codirectora del Grupo de Trabajo sobre Asuntos Latinoamericanos (LAWG). “El gobierno estadounidense debe trabajar con la presidenta entrante para cumplir sus promesas de acabar con la corrupción y mejorar las vidas de los ciudadanos hondureños. La Administración Biden debe trabajar en estrecha colaboración con diversos sectores de la sociedad civil en Honduras para abordar las causas fundamentales de la migración forzada, mejorar las vidas de los más vulnerables y ampliar el espacio disponible para que los ciudadanos hondureños ejerzan sus derechos sin miedo a represalias”.
“La toma de posesión de la presidenta electa Xiomara Castro es una oportunidad para que EE.UU. apoye a las comunidades de inmigrantes hondureños en EE.UU. y a sus familias en Honduras mediante la redesignación del Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) para Honduras”, agregó Daniella Burgi-Palomino, codirectora de LAWG. “La realidad es que los hondureños todavía están sufriendo los impactos de los huracanes gemelos agravados por los desastres naturales en curso y el TPS permitiría a sus familiares en EE.UU. enviarle dinero a sus familias en Honduras y actuar como salvavidas, fortaleciendo también la economía hondureña. Para eso se creó el estatuto del TPS. Otorgar TPS para Honduras será beneficioso para las comunidades en los Estados Unidos y Honduras y será un fuerte reconocimiento de las contribuciones de los inmigrantes hondureños en los Estados Unidos. Es hora de que Estados Unidos use esta herramienta”.
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